domingo, 4 de agosto de 2013

¿QUIEN DIJO MIEDO?

De todo habido durante estos cinco meses que llevo preparándome. Desde alegrías, euforia, tristeza y hasta miedo.
Pues otra cosa que he dejado en el camino recorrido de hoy, el miedo, si, el miedo a no poder llegar.

Como comente esta semana, hoy quería volver a encontrarme con el camino y a su vez coger otro punto mas de confianza y con este estar muy seguro de que estoy preparado de cabeza y cuerpo.
Pues el resultado es sobresaliente, lo estoy,  de testigo tengo a un gran amigo Patxi Robles.

A las 6 horas de la mañana salia junto a Patxi desde la Fuente de la Junquera, con intención de poco a poco por los caminos llegar hasta Cariñena.

Salíamos con frontal, el cual nos ayudaría hasta las siete de la mañana. Desde el principio tanto Patxi como yo bebíamos y comíamos algo.
Yo para ir probando he llevado, plátanos, una barrita, frutos secos, un gel y membrillo. Todo me ha ido bien, lo único el membrillo, no era el que hacia mi abuela, seguro que ese me daba mas energía.

El ritmo era como yo había calculado, algo menos de seis el kilómetro, mas o menos unos diez kilómetros a la hora.
Según íbamos avanzando, iba amaneciendo y ya se empezaba a unir otro mas con nosotros, que nos acompañaría hasta el final, le dicen Lorenzo o el Sol.
Pasamos Cuarte, Santa Fe, Cadrete y Maria. Al llegar a Botorrita cruzamos el pueblo y vamos en busca de un camino que empezaba en el campo de fútbol. Esta parte no la conocía, yo la primera vez lo hice pegado a la vía del tren hasta Muel. Esta vez era algo mas metido en el monte y aunque hay mas desnivel se hace mas agradable que pegado a la vía.

Llegamos a Muel, mitad de recorrido y hacemos del parque punto de avituallamiento.


 A partir de aquí empezara lo mas aburrido, iremos en busca de la autovía y ya  hasta Cariñena pegados a ella, no hay para coger agua tampoco, así que rellenamos a tope. Pasamos Muel andando aprovechando para comer algo.
Una vez salimos de Muel, volvemos a coger ritmo, algo que me cuenta Patxi, algo que le cuento yo, vamos comiendo kilómetros.

         cementera de Muel


                                                           
 Cuando llegamos a Longares, veo que según mi reloj no habíamos avanzado desde Muel, pues no se como lo había parado. Como llevaba el track en el reloj no había problema, lo haríamos al revés, por lo que nos quedaba, no por lo que llevábamos, por cierto, me he dado cuenta que cuando va quedando poco es mejor ver lo que queda que lo que uno lleva.

Cuando ya nos quedan solo ocho kilómetros, llamo a quien nos vendría a buscar, mi amigo Raul. Decir que arriesgamos a salir sin tener el regreso de vuelta. Raul me comento, que solo nos fallaría si ligaba por la noche. Lo siento por él, pero no triunfo.

Y pasado esos ocho kilómetros, conseguido.
Gracias Patxi por la compañía, aunque no me has llevado a hombros,  me has ayudado a disfrutar de la mañana.


El resto de la semana en cuanto a entrenamientos.
Lunes           11 kilómetros
Martes         16 kilómetros
Miercoles     17 kilómetros
Jueves          Estiramientos y 300 abdominales
Viernes        18 kilómetros
Sabado         descanso
Domingo      50 kilómetros

Solo nos queda un mes, vamos que lo tenemos hecho.

2 comentarios:

  1. Vaya dos maquinicas!!!!
    Tranquilo David, en Septiembre estaremos ahi contigo viendo como consigues tu reto!!!!
    Avantiiii David!!!

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  2. Vaya dos maquinicas!!!!
    Tranquilo David, en Septiembre estaremos ahi contigo viendo como consigues tu reto!!!!
    Avantiiii David!!!

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